"Esto es lo que te gusta hacer, esto es lo que sabes hacer bien, hazlo hasta el límite y estarás satisfecho". Harry Wilson

lunes, 31 de octubre de 2011

Empieza el riesgo.

Cuatro zonas energéticas a trabajar, 8 medios de entrenamientos diferentes para combinarse y buscar los objetivos del período que empezamos esta semana. Comienza una preparación integrada, alternante y multilateral, muchos medios de entrenamiento a la vez bajo un sistema de periodización tradicional, dos semanas de carga y una de descarga. Es después de 8 semanas de entrenamiento que ya nos sumergimos en plena vorágine de entrenos. Vamos a cargar bastante y lo alternaremos con unas cuantas competiciones de Cros en los próximos meses. El riesgo va a estar a la orden del día y ahí radicará el arte de entrenar y de dirigir al grupo de entrenamiento por mi parte. Si a eso sumamos las varias individualidades que tengo que supervisar (creo que no más de 2 o tres atletas hacen exactamente el mismo programa de entrenamiento), esta fase que ahora empieza complica el trabajo y hay que empezar a aplicarse, atletas y entrenador! Como toda preparación al límite, hay que saber valorar en cada momento justo la utilidad de cada sesión de entrenamiento. Ese es mi principal atención sobre el quehacer diario. Es útil lo que vamos a hacer? Vale la pena hacerlo si no estamos en condiciones? Todo trabajo sea cual sea la condición en el que lo realizamos suma? Para mí la respuesta es NO. Y eso es lo que intento evitar a toda costa cada semana y en cada sesión. Pretendo siempre realizar trabajo que suponga sumar rendimiento futuro para mí atleta. De que me vale, por ejemplo, realizar una sesión de velocidad con una carga excesiva en las piernas si: a/ No van a poder desarrollar su máxima velocidad (condición innegociable para trabajarla) y b/ Puedo arriesgarme a tener que parar días posteriores por el incremento de la carga o que esta degenere en molestia o lesión. Por eso, a partir de ahora, soy como un compositor de música, un chef de cocina. Quiero aplicar todos esos ingredientes o quiero hacer una sinfonía con muchos instrumentos, pero cada ingrediente, cada instrumento, tiene que encajar a la perfección en el conjunto que van a completar entre todos. Ningún sabor puede pasarse, ningún instrumento puede chirriar.

Una manera de lograrlo es ir trabajando con pocos elementos en cada sesión. No más de un medio o dos por sesión. Una de mis máximas es siempre NO COMPLICARSE LA VIDA, hay que aplicar los medios teniendo un continúo feedback con el y el atleta, hay que saber en cada momento que respuesta tiene el cuerpo en cada ejercicio, hay que comprobar que se asimila ese trabajo. La POTENCIA AERÓBICA es eso, potencia aeróbica, igual que la resistencia láctica, o la fuerza o la velocidad. No pretendamos complicarnos la vida en aplicar sistemas complejos, mezclas de capacidades varias en una misma sesión, que si no nos salen como querríamos no sepamos donde está el error. Siempre recuerdo un entrenador que teorizaba y explicaba como de elaborado había que hacer el entrenamiento para poder afinar para tiempos ya importantes, de nivel olímpico. Un ejemplo eran sus sesiones de fuerza salpicadas cada dos ejercicios por una serie de potencia aeróbica. Meses más tarde, descubrimos todos, y estaréis de acuerdo conmigo, que se olvidó decirnos que dichos sistemas solo eran aplicables con trampas!

Por eso, para evitar errores, riesgos, para tener controlado en todo momento la ejecución del programa, no hay que complicarse la vida! Si nuestro atleta tiene capacidad de sacrificio, seriedad, voluntad de trabajar duramente y si encima tiene talento, irá asimilando las cargas sin problemas. Estos solo surgirán cuando hayamos quemado ya demasiadas naves, cuando su capacidad de trabajo entrenable útil haya llegado al límite, cuando ya no sepamos que cargas aplicar para lograr que no se pare la progresión de esa persona. Aquí radica otro de los problemas, las excesivas, a veces, cargas o volumen de trabajo. Es evidente que hay que buscar el MAXIMO rendimiento con el MINIMO entrenamiento/carga posible, así aseguramos la progresión de nuestro atleta y guardamos estímulos para futuras mejoras.

Por eso hablo del riesgo en el que entramos. Yo lo tengo claro, tengo que, y quiero, "cocinar" y "componer" con muchas variables a la vez. Muchos medios, varias zonas energéticas, una periodización tradicional, sin complicarme la vida, trabajando no más de dos capacidades en la misma sesión, haciendo siempre trabajo útil y deshechando el riesgo de lesiones, buscando un feedback permanente y realizando y midiendo el volumen justo para asegurar una progresión y una asimilación correcta de todas las cargas. Bufff, vaya puzzle! Lo peor (o mejor, según como se lea) es que no es filosofía pura, sino que sale en el papel, y lo aplicamos en toda su extensión a partir de este lunes 30 de Octubre!

 

miércoles, 26 de octubre de 2011

Marcando etapas.

Con las primeras competiciones a la vuelta de la esquina, seguimos quemando etapas de nuestra recién empezada temporada. Todo sigue en orden, cada atleta va empezando a transitar en su preparación con la constatación de que el objetivo marcado en el primer período se ha conseguido. Así pues estamos dispuestos a trabajar en la época de más volumen con ese pequeño salto de calidad que intentamos cada inicio de temporada.

A pesar de andar escasos de volumen de entrenamiento, debido justamente a la prioridad que impongo en la intensidad de los ejercicios, empezaremos pronto a competir en pruebas de cros. La intención no es más que la de un entrenamiento de carácter aeróbico intensivo, por la prontitud de estas pruebas y por lo poco especialistas que somos de ellas. Aparte, estamos inmersos en las primeras sesiones importantes de fuerza y velocidad y eso nos hará llegar más cargados de lo normal a estas competiciones.
Suelo hacer un seguimiento estadístico temporada tras temporada de los ritmos de entrenos y puedo constatar que un año más, las cosas van sobre ruedas. Nos vamos convirtiendo cada vez más en mejores atletas y sabemos que la parte física no es un problema para llegar donde pretendemos, solo la mental! Somos ya regulares en los ritmos que uno o dos años atrás hacíamos de forma esporádica y eso es muy importante! El ritmo de resistencia aeróbica ya es de manera rutinaria importante, incluso en días que no nos acabamos de encontrar finos el ritmo es a una velocidad útil. Eso ayuda y mucho, ya que aún (y crucemos los dedos) no hemos tenido sesiones "basura" de esas que vienen cada cuanto y en la que tienes que rendirte en cuestión de poner a toda costa un mínimo ritmo, a causa de la carga acumulada. La potencia aeróbica, organizada con un volumen útil para las pruebas que preparamos también ha visto esta mejora en el ritmo y la asiduidad de estos. También ayuda a esto el que de manera espontánea se hayan formado dos grupos de ritmo bien definidos, así que mientras unos se ayudan a poner el ritmo de las series, otros van de manera crítica con el gancho y mejoran a pasos agigantados adaptándose rápidamente a unos tiempos que antes les eran difícilmente conseguir.

Ahora se trata de entrar en esa etapa sorda de meses donde asentar las bases tanto de la resistencia aeróbica, como de la fuerza y la velocidad. Trabajo constante y voluntarioso, donde el máximo objetivo es acumular volumen en su justa medida, que solo se verá salpicado con una pequeña incursión en el cros cada cuanto. de momento tenemos en mente 3 fechas, el 6 y el 20 de noviembre del circuit gironi de cros y el 11 de diciembre con el cros de Granollers. Tres días para comprobar como de bien va nuestra adaptación a la potencia aeróbica. La mejora en otros apartados, tendremos que comprobarlo con otros medios en la pista, tests de saltos o series cronometradas de velocidad serán las herramientas para comprobar esta mejora. De momento todo OK, ahora mismo hacemos solamente entre 1 y 3 décima más lento la misma distancia, 60 metros, que hace un mes, solo que antes lo hacíamos sin lastre (cinturón) y ahora con uno entre 6 y 8 kilos, no está mal! Del trabajo láctico.......mejor lo dejamos hasta dentro de un par o tres de meses. Opino que no tiene sentido trabajar tan pronto esta capacidad por varios motivos: 1- acelera la forma con rapidez y eso supone un riesgo inútil a estas alturas de la temporada. 2- no preparamos la pista cubierta y 3- consecuentemente, queda mucho tiempo aún para nuestra puesta a punto en verano. Un inicio de esa capacidad, y de manera muy general, se verá en enero y esa será la única base para competir/jugar en pista cubierta.

Por eso, lo que ahora toca es marcar bien las etapas a quemar, y esta en la que nos adentramos ahora, hay que consumirla a fuego lento ya que supondrá la base donde se asienten nuestros resultados de este año. Ya se sabe, un buen plato no es trabajo de cinco minutos, sino arte tranquilo en la cocina.

 

jueves, 20 de octubre de 2011

Volumen vs intensidad.

Hemos iniciado ya el entrenamiento formal en toda su expresión, podemos decir ya que estamos entrenando! Estamos trabajando ya con todos los medios que utilizaremos en invierno a excepción de dos o tres cositas que empezarán en un par de semanas. Hemos empezado de manera muy progresiva, tal como lo he hecho siempre, ya que he considerado que para mejorar y dar un salto de calidad, hay que incidir en la intensidad de los ritmos de entrenamientos. En una palabra. si quiero hacer tal marca, tengo que entrenar forzosamente en unos ritmos concretos. Hace pocos años me llegó un atleta que venía desanimado porque se había fijado como objetivo correr por debajo de 3'50'' el milqui y no lo había logrado. Su entrenador, creyendo que era un fracaso la marca conseguida, le aconsejó buscarse otro grupo. En la primera entrevista que tuve con él, le pregunté que ritmos había trabajado. Mi sorpresa fue cuando me explicó que el mil más rápido que había corrido nunca entrenando era a 2.42. Era evidente que no podía bajar de 3'50'' si el mil más rápido corrido en entrenos era a ritmo de 4'03''!!

Por eso, cuando concreto los objetivos que tenemos que conseguir con los chicos, programo en función de los ritmos que hay que lograr entrenando. Como esto es complicado porque cada año hay más exigencia, tengo que empezar buscando unos ritmos mínimos y en consecuencia cada año son más difíciles por intensos. Tengo claro este punto, la intensidad de la marca buscada tiene prioridad sobre el volumen del sistema energético trabajado. Cuando iniciamos cada principio de temporada lo hacemos de manera muy progresiva en el volumen para establecer desde el principio esa intensidad buscada, y el volumen total de la capacidad trabajada llega únicamente hasta el punto óptimo en que puedo desarrollar esa intensidad deseada. Para que, por ejemplo, trabajar mas de 6 kms de potencia aeróbica total en un ochocentista si ello va a determinar una bajada del ritmo hasta hacerlo poco específico a la prueba? Estamos en Octubre, y ya he visto atletas mediofondistas trabajando sobre más de 10 kms de series de potencia aeróbica. Que sentido tiene? Menudo estimulo! Y cuanto habrá que hacer o progresar en ese estímulo para lograr nuevas adaptaciones en el futuro? Trabajo inútil en mi opinión y pozo de posibles problemas en un futuro por la cantidad de volumen trabajado tan pronto. Tengo claro que el cuerpo, por más baja que sea la intensidad, no lo aguanta todo. No logro entender, como entrenador de mediofondo, que utilidad puede tener a las pruebas de ese sector. Tengo una formación diametralmente opuesta a un trabajo tan exagerado a estas alturas de temporada!

Para entendernos, yo, por ejemplo he iniciado ese trabajo de potencia aeróbica entre 4 y 5 kms totales para corredores de 800 metros y el volumen total, dependiendo de los objetivos trazados esta temporada, llegaran hasta los 6-8 kms según que atleta se trate. Con este justo volumen, cada año he logrado en un periodo anterior a la competición tiempos de entreno bastante por debajo de 2'30'' en chicos y de 2'50'' en chicas. Estoy seguro que con un volumen superior, esos tiempos no solo no se hubieran mejorado sino empeorado, ya que hubieran hecho mella en otros aspectos del entrenamiento, modificando las fibras musculares hacia más oxidativas y menos explosivas, algo que no me acaba de cuadrar nada para el mediofondo corto y poco para el milqui. Eso no significa que no entienda las pruebas de mediofondo, como pruebas de resistencia, más bien al contrario, ya que considero que para acceder a un gran tiempo en 800 metros el kilometraje total semanal debería rondar entre 100 y 120 kms semanales dependiendo del sexo del atleta, pero siempre teniendo como máximo objetivo trabajar la intensidad adecuada y específica de la prueba. Puede parecer un contrasentido esto último, ya que mas de un centenar de kms semanales no es lo mejor para unas fibras explosivas y rápidas, pero creo que he llegado a una preparación bien argumentada en la que conviven a la perfección la explosividad de la prueba, con el volumen idóneo e importante en cantidad y la intensidad específica y justa de la especialidad que practicamos.

 

sábado, 15 de octubre de 2011

Realizado en lo espiritual.

Es normal en un deporte como el nuestro, tener sueños de conseguir un rendimiento único para nosotros. Hacer atletismo es una lucha diaria contra nuestro propio esfuerzo y esa lucha te inspira y anima a tener esos sueños que, cuando vamos creciendo van volviéndose más ambiciosos. Primero campeonatos autonómicos, luego nacionales, más tarde internacionales, etc... También juegan aquí un papel importante aquellos que consiguen esos sueños más próximos con más facilidad, los atletas talentosos. Uno entiende que esos atletas tienen la oportunidad de su vida y ves en ellos la posibilidad de que, realmente, esos sueños se conviertan en realidad. Es entonces cuando te has de dar cuenta de si estás capacitado técnicamente para una empresa así o tienes que guiar el futuro de esos atletas hacia otros sitios, con gente con experiencia sobre esas competiciones. Lo que está claro es que la dimensión de la empresa cambia.

Recuerdo que cuando empecé en esto, alucinaba con cualquier marca que hiciera un atleta mío. Una vez, hace muchos años ya,  tuvimos en el grupo una chica cadete que corrió los mil metros en 3 minutos y 16 segundos. Realmente creíamos estar entrenando a toda una campeona de Catalunya cadete, pero nunca ganó una medalla. Había que correr mucho más. Era lo de más nivel que teníamos allí. Luego pasaron muchos atletas, y hacer una mínima para un campeonato de España de categorías menores era todo un subidón de nuestro ego. El atletismo absoluto a todos los niveles, incluso el autonómico, estaba tan lejos. Veía que jamás llegaría a tener un atleta en un campeonato de España absoluto, era una quimera aquello. No tenía los atletas para ello, pero sin saberlo me estaba formando buscando mi propia identidad como entrenador.

De repente, todo cambió, se generó una dinámica única. Aparecieron verdaderos talentos y empezó un esprint de ir aprendiendo poco a poco a gestionar cada vez campeonatos más importantes, resultados más importantes, atletas más importantes, más adultos y sobre todo con un ego cada vez más marcado por esos "éxitos". En realidad, aún hoy, por más medallas que haya ganado con mis atletas, considero que no he empatado con nadie. Como he dicho otras veces, sigo siendo un ignorante en la materia en proceso de formación. En este esprint sufrido en los últimos años, siempre he considerado lo más fundamental el entender que significaba cada paso, cuanto esfuerzo costaba, y cuanto había que valorarlo. Tenemos contacto con infinidades de deportistas y sabemos cuanto se sacrifican muchísimos para lograr sus objetivos. Por eso, siempre he entendido que los resultados dependen de uno mismo, del sacrificio de uno mismo, de la actitud de uno mismo, del trabajo de uno mismo. Siempre he dicho a mis atletas que solo podemos controlar aquello que nosotros hacemos, y sobre todo, que aquello que nosotros tiremos, aquel entreno que no realicemos, aquella oportunidad tirada por la razón que sea, siempre será recogida por otro deportista con muchas más ganas que nosotros y que persigue nuestro mismo sueño. Cada gesto nuestro lejos de nuestra oportunidad, será aprovechada tarde o temprano por otra persona con el mismo grado de sacrificio, mismo talento, pero que de verdad quiera aquello que persigue. Ley de vida!

Estamos a principio de temporada de un año olímpico. La prensa y las redes sociales me han podido enseñar con cuanta ambición, compromiso, ganas y motivación han empezado a entrenar decenas de atletas, unos con más talento que otros. Está claro que por la actitud mostrada por algunos, si no lo consiguen, cerca se quedarán de sus objetivos deseados. Que ambición y que amor por lo que hacen y por el verdadero reto que supone! Nunca he entendido esta "carrera" de querer lograr esos objetivos como una "ley de la jungla", al revés, siempre lo he visto como un trabajo artesanal, armonioso, arte científico lo podría definir, entre un atleta y su entrenador, con ese objetivo como santo y seña de un respeto, un trabajo y unos principios inquebrantables en el día a día. Es la suerte de poder coincidir poder trabajar con esa pequeña minoría  que entiende la excepcionalidad de la oportunidad que tienen (realmente pequeña minoría).

Mi película habla de la oportunidad que puedan tener solo unos cuantos elegidos, unos privilegiados, pocos en este país, unos cuantos más en nuestro continente y aún más en el mundo entero. Pero en todo caso, una auténtica minoría privilegiada, que tras entender realmente el precio del sacrificio que hay que hacer, el valor que hay que darle, los principios que hay que tener, saben perfectamente el significado de, en un futuro, poder explicar que ellos consiguieron el sueño que perseguían en su vida. Creo que no está nada mal para los tiempos difíciles que corren poder sentirte realizado plenamente a nivel espiritual y poder compartirlo.



domingo, 9 de octubre de 2011

Pequeño paraíso.

Hemos competido y hemos tenido la experiencia de hacerlo en Olot, una pista bastante especial como habéis podido comprobar estos días por aquí. Al salir, pregunté a una de mis atletas que qué tal le había parecido la pista, me contestó: un pequeño paraíso!

Me gustó la respuesta, no por ser obvia, ya que era evidente que haber pasado una tarde allí fue especial, sino porque me di cuenta de que el funcionamiento de los atletas en el día a día son una sucesiones de pequeños paraísos que hacen que nuestro deporte nos suponga una droga permanente. Son el "leiv motiv" sin el cual sería imposible realizar cientos de locuras que hacemos constantemente.

Ir a competir a una pista con un bosque dentro del anillo y rodeada de vegetación, indudablemente que es ir a competir a un pequeño paraíso, igual que entrenar allí o hacer una concentración. Pero no es menos cierto que el grado de satisfacción después de un rodaje a gran ritmo también supone estar en ese estado. O cuando hacemos nuestras mejores series de potencia aeróbica, una a una, hasta 6-7-8 series de mil y las bordas y acabas la última como nunca, paraíso al canto! O cuando rebajamos nuestro mejor tiempo en 500 a pesar de estar unos largos minutos absolutamente mareados y a punto de devolver, a la vuelta a la normalidad las batallitas de la gesta no paran en tres días!
O cuando realizamos nuestra primera mínima para ir a un campeonato de España, o nos metemos por primera vez en una final de un absoluto, o cuando somos por primera vez internacionales! O cuando directamente subimos a cualquier podium a recibir el reconocimiento de haber sido uno de los tres mejores!
Cuando las condiciones meteorológicas son nefastas y sacamos nuestro entreno. Cuando nos encontramos el día D a la hora H con un tiempo impecable, marca segura!
Cuando nos recuperamos de una lesión y podemos volver a entrenar, que ridículo reconocer que apenas unos minutos de carrera continua lenta nos supone entrar en verdadero trance!

Podría seguir y seguir con varios ejemplos, pero lo que es verdad es que hoy hemos tenido esa ración de pequeño paraíso. Hemos corrido diversas pruebas con marcas normales. Sin embargo las sensaciones han sido tan buenas en casi todos los casos que nos hemos ido con una sonrisa de oreja a oreja. No ha hecho falta batir ningún record, más bien al contrario, pero correr un 400 en 53'', un milqui en 4'09'', un ocho en 2'40'' y sendos 3000 en 9'27'' y 10'16'' con apenas 4 sesiones en progresión a la semana en el último mes, en un entorno privilegiado como el de hoy, transforma la visión de las cosas, relaja la tensión de la competición y provoca una sensación de bienestar impagable para afrontar, ahora si y a partir del lunes, el inicio de los entrenamiento serios de esta nueva temporada 2011-2012. Lo dicho, simplemente un pequeño paraíso!


jueves, 6 de octubre de 2011

Caramelo.

Es normal que en un grupo de entrenamiento se esté en la constante búsqueda de buenos sitios para entrenar, con todos los medios necesarios, buen clima y un entorno paisajístico ideal y motivante. En mi grupo también es así, a pesar de que hablamos mucho y luego nada de nada, siempre nos quedamos en casa. Yo considero ideal el realizar stages en plena temporada, pero es difícil hacerlo posible, una por el coste económico y otra por la dificultad de los atletas de dejar su entorno varios días. El último que realizamos en diciembre pasado en el Algarve portugués para mi fue un descubrimiento muy positivo. Bastante mejor clima que en Mataró, aunque coincidiese con una profunda borrasca instalada en la zona del estrecho, las condiciones de entreno fueron las mejores que he tenido nunca. Había absolutamente todo lo necesario que hace falta para entrenar con todas las garantías y volvería a repetir ese stage con los ojos cerrados!

Entre los diversos sitios que siempre hemos pensado para una concentración y después de haber probado unos cuantos, Ibiza, Sevilla, Mallorca, el Algarve, etc... está uno muy cercano y en nuestra propia tierra. Nos lo han recomendado mucha gente, sobre todo por el entorno paisajístico que tiene. En medio de la naturaleza y con un estudio previo a su construcción de impacto ambiental, hace muchos años ya que construyeron la pista de atletismo de Olot. Una pista que respeta el medio ambiente hasta extremos impensables, gradas naturales de cesped, tartán verde para no romper la armonía del paisaje y lo pocas veces visto, el centro del estadio tal como estaba el entorno antes de su construcción, llena de árboles y rocas! Tanto es así que nos han dicho, y hemos podido comprobar por fotos, que los atletas desaparecen a la vista cuando corren por la contrarrecta. De hecho esta pista solo tiene homologados el anillo, las zonas de saltos y el área de lanzamiento de peso, no así la zona destinada a lanzamientos largos. Aparte de la situación y el encanto de la pista, por su propia puerta pasa la ruta verde "camí del carrilet" por lo que los runners tienen kilómetros y kilómetros (exactamente 59 hasta Girona) para sus rodajes por la Vall d'en Bàs, situación impecable y envidiable! Por si esto no fuera suficiente, a escasos 3 kms de Olot un bosque enigmático y espectacular para rodar nos espera: "La fageda (hayedo) d'en Jordà". La única cuestión a despejar sería comprobar si existe, y como de vestido está, un hipotético gimnasio para realizar las sesiones de fuerza.

A pesar de las recomendaciones nunca hemos tenido la oportunidad de acercarnos a comprobar in situ la bondad de las instalaciones. Pero mira por donde, como dije en la anterior "actu", buscando diversas competiciones para este invierno, me he topado con una "inauguración de las pistas de atletismo de Olot" (se refiere al nuevo edificio construido que alberga vestuarios y salas, no a la pista en sí, construida hace ya bastantes años). Que mejor oportunidad que esta competición sin ninguna pretensión competitiva para conocer las instalaciones? Dicho y hecho! Informé a mis atletas y....... todos a una a Olot a competir este próximo fin de semana! Aparte el programa nos ofrece la posibilidad de elegir la distancia que queramos entre el 400 m.l y el 3000 m.l, perfecto!

Así que este sábado se podría decir que debuta nuestra temporada, un pequeño caramelo que nos ponen en la boca y que espero que saboreemos y disfrutemos en la justa medida existente entre un bonito entorno y nuestra escasa forma física.


lunes, 3 de octubre de 2011

Por dios seguro...........que habrá baile!

Sábado mañana del mes de Octubre, un año más,.......nos empapamos de verde. Como un ritual que se repite año tras año, nos acercamos a nuestro sitio talismán de Canyamars. Talismán, sobre todo para mí, quizás no tanto para todos mis atletas, pero si para algunos. Es mi punto de partida a los objetivos de la temporada de mis chicos. Es un sitio donde reflexiono mientras ellos corren, organizo, pienso, soluciono, ideo, es un sitio donde la cabeza me suele discurrir con fluidez y tranquilidad, en definitiva es un sitio ideal para entrenar. Las piezas van encajando, vamos organizando nuestras competiciones aún sin salir el calendario, vamos poniendo día a día ladrillos para un nuevo salto de calidad, vamos controlando la mejora de nuestro ritmo de entrenamiento. La verdad es que después de 4 semanas, estoy más que satisfecho. Las reuniones mantenidas con mis chic@s creo que más o menos siguen las consignas acordadas, y aunque hay algunos que por desgracia siguen perdidos y a expensas de cuestiones banales y nada formadoras, no me quejo, ya que los chic@s van madurando por un buen camino y por consiguiente han empezado la temporada con ganas, y seriedad en el trabajo.

Como siempre digo, a veces no hace falta preparar grandes objetivos para tener una motivación muy especial. Creo tener gente nueva con ganas de mejorar, y creo tener gente que por fin dará un salto importante de un atletismo autonómico y sencillo, a muy buenas marcas que la lleven o dejen a las puertas de los campeonatos que más desean los chicos: los campeonatos de España. Estoy muy motivado con estas circunstancias, y, aunque aún es pronto, ya que acabamos de empezar y no tengo ni puñetera idea donde estará esta gente en Enero, por poner una fecha, yo me siento ilusionado con la posibilidad de conseguir los objetivos que creo pueden valer.

Este comienzo de temporada tranquilo, lejos de las competiciones, lejos del estrés de la intensidad de los entrenamientos más duros, también me hace ver de manera diferente el atletismo. La competición más sencilla me motiva, las haría todas! Me olvido de que mucho de los chicos tendrán una agenda de competiciones repleta, y que meses más tarde, como siempre, nos diremos que no debimos hacer tal o cual competición. Ahora mismo, eso no existe, abordo con mucho entusiasmo estos primeros días y busco carreras por todas partes. Hemos hablado de hacer croses por España o Francia, busco mitines indoor o de verano creyendo poder ir a todos, incluso me fijo en la ruta!
Lo que está claro es que ahora debemos tirar más que nunca de entusiasmo, es la mejor vía de mejora.

Ver esta gente correr por este sitio aún me hace creer más en ellos. Lejos de nuestra habitual pista, me pongo en medio del camino a hacer fotografías, los espero en silencio, mirando a mi alrededor, buscando detalles de la naturaleza, esperando, incluso, el sonido de algún animal, cuando de repente.....un sonido acompasado empieza a acercarse, pasos apresurados que pisan hojas muertas, el sonido de una respiración jadeante por el ejercicio, son ellos! Y entonces, pasan a mi lado, mi cámara dispara, y luego se alejan, y vuelve ese ruido, esos pasos, y más tarde, ya no se oyen, solo queda el viento, el caer de las hojas y ese misterioso ronroneo que tiene el bosque. Y vuelvo a entusiasmarme y a pensar, a organizar, a solucionar, etc.....

Aquí, en nuestro espacio verde privilegiado, con toda la ilusión de hacerlo bien, con mils cosas motivantes que desearía hacer y se que no será todo posible, pienso, como en el final de una conocida película de una de mis "novias" y con el fondo tenue de "I say a little prayer": "quizás no habrá matrimonio, quizás no habrá sexo, pero por dios seguro......que habrá baile!


BLOGS INTERESANTES

© Bislett
Maira Gall