"Esto es lo que te gusta hacer, esto es lo que sabes hacer bien, hazlo hasta el límite y estarás satisfecho". Harry Wilson

sábado, 26 de septiembre de 2009

Intentar la mejor de las recetas.

Evidentemente , los resultados de los atletas entrenados por un entrenador depende básicamente de la receta elegida por este para desarrollar sus ideas. Está en consonancia con lo que piensa cada entrenador y es fiel reflejo de su personalidad. Mi pensamiento particular me lleva a los siguientes principios con los que llevo adelante mi trabajo. Para empezar, lo básico. Establecer objetivos, difíciles pero realizables. Después, la programación anual: Que tipo de periodización. Yo sigo utilizando una de tipo tradicional de 2 semanas de carga más una de descarga. La duración de los diferentes periodos: suelo utilizar periodos de 9 o 6 semanas, 2 o 3 mesociclos de tres semanas cada uno. Y para acabar elijo los medios de entrenamientos que utilizaré, bajo mis ideas de cada uno de ellos. Después, también, todo tendrá su sentido dependiendo de cómo entendemos todos estos conceptos. Por ejemplo: tengo la premisa de que es importantísimo no complicarse la vida, por tanto nunca entreno mas de dos capacidades en una misma sesión, fundamentalmente por dos motivos: 1º que podemos incidir más en la capacidad entrenada si son pocas las capacidades, que si trabajamos muchas a la vez y solo podemos dedicar un poquito a cada una de ellas. Y 2º, que es muchísimo mas fácil detectar y resolver problemas cuando surgen. Si las capacidades entrenadas son muchas a la vez , cual de ellas es la responsable del problema? O cual de las combinaciones?

Esos medios estarán elegidos basándonos en la distancia a entrenar, la individualidad del atleta entrenado y la especificidad de esos medios estarán en función de la edad y el nivel y objetivos del atleta en cuestión. Creo que tenemos que tender a una especificad de los ritmos y distancias entrenados y las recuperaciones de cada uno de ellos. Ahí entra en acción la receta muy particular de cada entrenador, los pequeños secretos, que cada uno aplica para lograr que sus atletas corran más. En ese sentido , cada maestrillo tiene su librillo ( no soy nadie para enseñarle algo a alguien), y yo, particularmente, para según que distancias estoy muy contento con el que estoy llevando a cabo, estando abierto, por supuesto, a empaparme de nuevas ideas que puedan mejorar la receta. Porque, volviendo al principio de toda la historia, lo que está claro es que hay que aceptar que somos aún unos ignorantes de esto y que siempre podemos aprender más!


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