"Esto es lo que te gusta hacer, esto es lo que sabes hacer bien, hazlo hasta el límite y estarás satisfecho". Harry Wilson

domingo, 21 de agosto de 2011

Laberinto.

En pleno proceso de programar la siguiente temporada me encuentro ante la tesitura de entrar en el laberinto que supone el próximo verano y correr el riesgo de no salir vivo de ahí!

Me explico! Año Olímpico, año de Europeo, año de Iberoamericanos, y una vez acabadas todas estas competiciones....año de campeonato de España absoluto! Difícil poner sobre el papel un orden en la periodización de la temporada que viene! Está claro que hay una primera parte de la temporada que acabará el 7 y 8 de julio con los controles pre-olímpicos de la RFEA. Las carreras importantes con la plena forma de los atletas serán antes de esa fecha. Los que quieran acudir al Europeo, aun antes habrán de estar bien, y los que vayan a Venezuela, al Iberoamericano, a principios de mayo deberán demostrar algo. Resumiendo, entre mayo y junio se verán grandes carreras, o al menos eso parece.

Para empezar, los atletas de nivel autonómico, no parece que vayan a tener esos problemas, y veremos un julio con campeonatos y controles de manera normal, así que su programación no debe diferir en mucho a las anteriores.

El lío surge en dos direcciones. Primero, para aquellos que participan en el campeonato de España absoluto, hay dos opciones. 1/ Estar en plena forma y aprovechar las competiciones de junio y principio de julio y luego hacer un "meso" de preparación al absoluto, o 2/ Atrasar toda la programación unas semanas para llegar al Campeonato de España absoluto descansado, aunque con el riesgo de no afrontar esas competiciones de junio y julio en plena forma. Difícil decisión! Aunque ya tengo un voluntario que ha pedido un atraso de todo, asumiendo que quizás no esté en plena forma en las carreras más rápidas de principio de temporada, pero con una frescura que quizás no encuentren otros atletas a final de agosto

Después viene la otra cuestión. Que hacer con alguno que quizás plantee el querer ir a uno de estos campeonatos internacionales. Incluso los más asequibles tienen su riesgo, ya que intentar ir al Iberoamericano, a final de mayo, significa tener un estado de forma bueno a principios de ese mes, correr rápido en algún sitio, que te seleccionen, y después afrontar un viaje transcontinental que quizás trastoque las competiciones de las inmediatas siguientes semanas, las mejores!

Por lo que intuyo, aparte de la importancia de la programación, esta será una temporada de tener los pies bien puestos en la tierra. Habrá que comprometerse con unos objetivos muy claros, y no desviarse de ellos. Aparte surgirá una variable a la que no están acostumbrados mis atletas, quedarse sin verano y entrenar todo el mes de agosto.
Habrá que tener claro para que luchamos y las posibilidades reales de conseguir los objetivos. Por que entre otras cosas, esta cantidad de variables en el calendario, hará esta temporada de las más individualizadas que recuerdo. A saber, cuento todas estas opciones.

1-calendario autonómico
2-calendario para nacional promesa
3-calendario para nacional promesa y luego absoluto
4-calendario nacional absoluto atrasado
5-calendario nacional absoluto con plena forma hasta 7-8 de julio y luego "meso" de preparación
6-calendario camp internacional, plena forma hasta 7-8 de julio y luego "meso" de preparación nacional absoluto

Después de salir "trasquilado" un par de veces esta temporada con objetivos no conseguidos, creo que he aprendido la lección que le toca al entrenador. Sigo siendo un ignorante en proceso de formación en el plano técnico. Aún no tengo las llaves de las competiciones internacionales y si domino, al menos, el reloj del calendario nacional. Así que aventuras sin compromiso en el plano mental, como hice esta temporada pasada, no van a ocurrir ya. Me han señalado claramente el camino a seguir y he aprendido a no soñar con los peces de colores. El calendario está ahí. El trabajo a desarrollar también. Lo que cuenta ahora es arremangarse, currar en el aspecto técnico y escoger cual de los caminos del próximo verano elegimos para cada uno de los atletas que entreno. Tampoco es para tanto. Que niño no ha conseguido salir del laberinto de cualquier parque?

 

1 comentario

Viejo dijo...

"Aparte surgirá una variable a la que no están acostumbrados mis atletas, quedarse sin verano y entrenar todo el mes de agosto."

Y que mejor veraneo que poder ENTRENAR sin problemas de horarios.
Por lo menos así era en nuestra época. Sí sí, ya se que era el paleolítico.

Un abrazo y gracias.
PD le dices a Mary, que no se lo digo a todas y que en su caso es VERDAD.

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