Recta final.

Las carreras suelen definirse en todos los sentidos en la recta final, para bien y para mal. La recta final es el reflejo del planteamiento anterior de la carrera. Es la guinda o la dejadez total, es la felicidad o la crispación, es el objetivo cumplido o la frustración. Es el vivo retrato de la mentalidad de ese día, de esa carrera. La recta final no comienza en los últimos 100 metros, comienza antes del calentamiento y no acaba en la línea de meta, sino en la celebración posterior e incluso en la línea de meta de la siguiente carrera, saldando cuentas pendientes. La recta final no es solamente una carrera, es toda una temporada, toda una apuesta. Es un "ha valido la pena", es un "que coño está pasando!", es un "el año que viene a por más", es un "lo dejo", es un billete a un gran campeonato, es una medalla de oro, es un último puesto, es una lesión, es una mínima internacional, es un primer campeonato de España. La recta final da sentido a los corredores, da sentido al correr.

En esa recta final estamos, en la que dará sentido a toda la temporada 2010-2011. Durante estos meses hemos tenido unas cuantas, y en muchos sentidos, con sensaciones contradictorias, con felicidad, inesperadas, decepcionantes, dispersas y conectadas.
Nuestras rectas finales han visto una selección a un campeonato de Europa, una medalla absoluta, un campeonato promesa para olvidar, una lección de las que, o se sale adelante o lo dejamos estar, una permanente depre, una sorpresa casi veterana, un plazo de mínima tirado. Nuestra recta final ha visto especular con entrenos y competiciones, ha visto regatear muchas sesiónes de entreno, ha visto celebrar records con croissants rumanos, ha visto innumerables viajes nacionales y al extranjero, nuestra recta final también ha sido simplemente 100 metros en "X" segundos sin más!

Dicen algunos fisiólogos que la recta final es la expresión de la más simple de las vías energéticas. el sistema está absolutamente bloqueado y utilizamos simplemente O2. Poca complejidad para toda una complicada explicación de una carrera, de una actitud, de toda una temporada. Aparte, la última recta es aquella donde va a acabar toda la tensión aplicada a un objetivo, toda la aplicación de la inteligencia para lograrlo. Como bien sabéis que digo: "correr es un ejercicio de inteligencia".
Quedan poco menos de 4 semanas y dos-tres competiciones para acabar nuestra recta final. Estamos entrando a la altura del 120, aún corremos en curva y estamos ansioso de abrirnos y pasar rivales. Algunos ya están fuera de carrera, es evidente, pero nos queda gente con ganas y motivados para acelerar al final. PODEMOS! La semana que viene veremos si lo hemos hecho, Castres, BCN y Tallín marcarán los últimos 50 metros e incluso la línea de meta para algunos. Después quedará tirarse en los cuadros, Málaga espera.

Más tarde tocarán valoraciones. Si entramos bien en calle libre, si marcamos al rival adecuado o nos equivocamos, si pasamos bien la ría o el tiempo del mil fue el correcto. si debimos tirar o colaborar, si así valió la pena o si hay disculpas entre medio, si fuimos personas y deportistas o si esto no compensa por más marcas y medallas que ganemos. Valoraremos ránquing y competiciones. Buscaremos explicaciones, me preguntarán, me pasarán cuentas y deberé responder, asumir los logros y los fracasos. Me felicitaran y estarán orgullosos de mí, pero también dudaran, exactamente las mismas felicitaciones y dudas que tendré yo.

Y para acabar, encarar una nueva carrera. Nuevos objetivos, nuevos compromisos. Caras que se van y nuevas caras que llegan. Una nueva recta final para cada uno de nosotros. 100 metros cada año que marcan toda una vida, toda una carrera deportiva, toda una etapa para recordar.