En boxes.

Intentar hacer un deporte de manera seria, tienes sus compensaciones, pero también sus problemas. El peor de todos, las lesiones! No somos un grupo con especial problemas de lesiones, pero a veces, todo sale al revés y te encuentras con más gente de la deseada parada y en tratamiento de recuperación. Es lo que me ha estado pasando estas últimas semanas y parece que la luz ya se al final del túnel para todos.

Como he dicho no solemos tener lesiones importantes. No se a ciencia cierta que hacemos de bien para ello, pero el método indica que nuestro programa no es proclive a lesiones y, aparte, utilizo mucho el sentido común cuando hay molestias que pueden ir a peor. Ante el mínimo riesgo de lesión suelo parar a mis atletas. No tengo problemas en suprimir partes del entrenamiento sin no son adecuadas al estado de mis atletas. Pierdo una sesión o parte de ella, si, pero quizás estoy ganando una semana! También es verdad, que siempre la última palabra la tienen mis atletas. Ellos deciden, ellos valoran los pros y los contras y se acogen a mi sugerencia de parar o siguen entrenando adoptando la responsabilidad de la decisión. Supongo también que incidir en el trabajo técnico y recomendar una vida "ordenada" fuera de los entrenamientos, ayudan de manera decisiva a no tener problemas gordos.

De hecho, la lesión mas importante que tengo ahora mismo en mi grupo, fue justamente por actuar de manera contraria de mi forma de pensar de uno de mis atletas. Con tal de no parar y no perder sesiones, mi atleta decidió seguir entrenando ocultándome durante mucho tiempo sus molestias, que después derivaron a lesión. Cuando dio la voz de alarma era demasiado tarde. Esa lesión ya estaba en un grado importante. Está siendo tratada de manera intensiva, pero ya dura cerca de 2 meses, y aún nos queda recorrer un poco más de desierto. Desgraciadamente hemos perdido de goleada con la gestión de este tema, pero no se actuó con el sentido común que proclamo para estos casos.........

También hemos realizado una larguísima travesía del desierto con otro de mis atletas. Llegó al grupo con un buen historial de problemas a raíz de un apoyo deficiente. Al empezar la nueva temporada, una plantilla nueva mal diseñada y un sistema de entrenamiento totalmente novedoso para él fueron determinantes para caer lesionado de manera fulminante. Con apenas sesiones ligeras de principio de temporada, las molestias empezaron a aparecer hasta hacerse persistentes. Resultado: lo que nunca me había pasado como entrenador, una temporada en blanco y solución quirúrgica del problema. Mal cuerpo y sensación de estar totalmente en deuda con mi atleta. Estos días, cogemos impulso para empezar a saldar sus sueños de cuando llegó! Llevamos ya un mes de carrera continua en progresión del tiempo de las sesiones. Lo que empezó con un tímido trote de 5 minutos ya va por los 40 minutos de resistencia aeróbica! Y sin molestias!

El box de reparación, en esta época, ha batido records, ya que he tenido no uno, ni dos, sino tres lesionados de importancia. El tercero no es por eso achacable al deporte que practicamos. Uno de nuestros puntales ha visto como era operado en la garganta para solucionar sus problemas de anginas, atacado hasta 5 veces este invierno por infecciones de garganta! Operación, molestias importantes en el post operatorio y 20 días de baja, han sido suficientes para empezar otra vez en perfectas condiciones a trabajar. Y doy fe de ello, ya que su ritmo al acabar su tercer rodaje de la vuelta a la actividad ya era a 3'20'' el kilómetro!

Nuestra enfermería particular se está vaciando, y solamente tenemos que gestionar las molestias semanales normales que hay en todos los grupos de entrenamientos. Creo que si actuamos de manera inteligente, en poquito tiempo, podría cerrar hasta el chiringuito de las reparaciones. Sentido común, buena ejecución técnica de los ejercicios y descargas preventivas, y unas buenas pautas del entrenamiento "invisible" son el mejor remedio para olvidarnos hasta del color del parte de lesiones!